LO AGÓNICO DEL TIEMPO
Lo conceptual
la noche que
deviene en noche
la estrella que deviene en estrella
el canto que
solo es bello
el campo que
deviene en flores
el sol que
calienta y hace brotar
la
tierra que se abre generosa y dadivosa
lo poético no
conceptual
la sumergida esfera del sueño
los párpados
en ella caen
se alzan
las alas de la luna
deviene en infinito titilante
sobrecogedor
se estremece el semblante
el pecho
expande sus suspiros
te prefiero
de lejos
grita el
poeta loco de amor
loco de rabia,
loco de afanes
en celosías
se esconde el amor, que no regresa
y por eso
dice loco, pretérito
te prefiero
lejos
por cuanto
solo ansía de cerca verle
y siento en
mi brazo,
la leve
caricia del viento en su pasar
que así, se va desplegando como alado corcel
y así, se va soltando en la tenue luz, la
radiante cabellera
te prefiero de lejos, grita el poeta
que solo
muere en su descenso
en agónicos
abismos
mientras se
va desplegando la blanca dentadura
habiéndose
instalado en el alma de las cosas
abriéndose paso hacia el agujero infinito
la luz
deviene a donde se juntan todas las melancolías
perpetuadas
estas y casi eternas
son como la
sombra de la cual se alimenta la faz
y se define
la forma mediática del tiempo
y el tálamo
falso de los días
y en todo
caso la copa
en que bebe el poeta es la cicuta
que cortara
su cabeza
y que será
servida en bandeja de plata
el cenit alza
su vuelo
a la par que
el poeta camina
hacia el
laberinto del último tramo
hacia donde
se destaja,
la cabeza de la efímera cabellera
Beatriz Elena
Morales Estrada©
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