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sábado, 22 de octubre de 2016

ACERCA DE LO QUE OCURRE






                                     ACERCA DE LO QUE OCURRE

Bueno, no sé nada de política, pero veo,  que los del sí,  están enojados, con los del no y eso,  no debería será así. Detrás de esto, y es  posible,  estén,  los mismos procedimientos,  que toda la vida,  han  hecho,  que el pueblo colombiano,  se mate entre  sí; solo,  que ahora,  hay un cambio de color. Es blanco.  Todo el pueblo  colombiano;  estoy segura,  desea la paz y ¿Quién no? 
 Los del sí, le están es dando poder al uribismo; ya que dicen, que ellos, los del no,  son uribistas, cosa, que creo,  que  no es así, quizá,  sea,  solo una pequeña parte y nada más.
El pueblo colombiano,  le teme y como no, a una segunda Venezuela y es que ya,  estamos viendo,  los gérmenes de ella, en nuestro país ¿porque? Con este gobierno, hemos visto, que ya,  está  cobrando impuesto a las gaseosas, a un simple refresco, y a cosas,  que son recreación y para la salud,  de las personas, como el deporte y ahora,  con esa,  tal reforma tributaria;  hay sí,  que no fregamos,  más todavía.
 Hasta,   los pobres pensionados,  van a chupar, porque les van,  a sacar parte de la pensión, y de hecho,   ya les sacan,  con eso,  de los impuestos,  del IVA.  
 ¿A dónde va a quedar,  la pensión de la gente que toda la vida se mató trabajado tanto? Muy reducida. 
Y eso,  abre una brecha,  más grande todavía,  los ricos,  cada día más ricos y los pobres cada vez más pobres y con menos posibilidades. Mientras se gestiona la paz; un niño murió,  víctima de las mortales bombas,  quiebra  patas; exploto en su pies.
 El sector  de la salud, el desempleo y el abandono, en muchas regiones,  por parte del gobierno o de los gobiernos de turno  y en la guajira y en el choco,  muchos niños,  mueren de hambre, son muchas cosas; de manera pues,  que para hablar de paz,  hay que hablar de justicia  y de una repartición equitativa de los bienes.  Y creo, que los colombianos,  le temen mucho,  a esos grupos guerrilleros,  porque han sido,  terriblemente  crueles y han atentado es,  contra el mismo pueblo colombiano, como  campesinos  y  personas inocentes. Han hecho mucho daño. En  una democracia, estos hombres,  tienen derecho a presentarse  como candidatos.
 Y es mejor eso,  a que sigan asesinado,  al humilde y al  inocente y a la misma naturaleza. Sabemos, que al pueblo nunca le toca, dado, que todos estos grupos,  lo que buscan es el poder, no el poder del pueblo, sino el poder,  de un dictador oculto, en cada uno de ellos,  de los líderes. Pero las oligarquías colombianas,  por su parte,  han hecho de las suyas; han sido y   son corruptas,   con  este pueblo, lo han  vendido,  al por mayor y a detal.  Hay   manipulación, en el discurso retorico,  que se maneja  y manipulación  dada,  atraves de  los medios de comunicación, puestos al servicio,  de las élites de turno.  Y  hasta,  en  las encuestas del Dane;  debemos dudar.  Un gobierno al estilo Venezuela,  no le conviene a nadie, porque,  desde los más pobres  y hasta la pequeña, mediana    y grandes industrias,   se verían  afectadas con esto. No queremos gobiernos totalitarios,  ni absolutos. Cuando un gobernante,  hace algo, es porque,  ya tiene,  atrás de sus manos,  un as guardado, una nueva estrategia para segur dominando. 
Estoy segura,  el pueblo  colombiano, tanto,  los del sí,   como los del no,  quieren la  paz.  Pero no olvidemos,  que sin justicia,  no hay paz  y un pueblo con  hambre y  sin educación ,   con necesidades  y sin oportunidades,  y   terriblemente  golpeado, es muy difícil,  que pueda tener paz.
 La paz, es prioridad de  todos y surge del corazón, pero  hemos abandonado,  los principios, los mandamientos de la  ley de Dios.
 Si nos apropiamos,  de estos mandamientos, sin hipocresía y sin máscaras, sin  caretas; estoy segura,  que lograremos  la paz,   porque seremos políticamente correctos,  y no haremos,  uso del poder,  para enriquecernos,  a costa del sufrimiento y del dolor de  los otros, de los oprimidos, de los verdaderos   llagados. Los pobres.    La paz es de todos  y para todos. Por la paz, también se ora, se pide a Dios; pero también,  se hace  cuando somos justos, hasta en la más mínima expresión. 
De manera,  que  debemos estar alertas.
Y que la paz sea,  con todos nosotros. Una paz duradera y verdadera, merecedora  de eso color; que representa la pureza;  que nos cobije a todos, no solo de palabra, sino de hecho y de hechos, de acciones, de obras.


 Beatriz Elena Morales Estrada©

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