EN SU MÍSTICO MIRAR LA ROSA
Mi corazón es un tamborileo
que quiere alzarse lejos del mundo
a veces se suele pasar así …
Y desde el suelo,
alza en su místico mirar;
la rosa, que en su desesperarse,
despejarse, quiere,
porque abrumada se pregunta
¿En qué lejanías del horizonte se funda la esperanza?
y ante estos ojos que aún no ha visto los tuyos
se aparecen de repente
cantos y arrullos de la mañana,
ya llegaron haciendo su recorrido,
en especial en el mundo de las cosas
al desdoblarse la aurora
ligera, ligera,
aparece y desaparece
dejando apenas un leve colorido
pero que late inmerso,
en el gran gestor universal de la palabra
el universo se mueve y siempre habrá un comienzo nuevo
un renovarse las cosas,
si, como por un libro abierto a un nuevo amanecer
el verso que no sé yo hacer
nació y originó al universo
como un preludio…
El universo es un verso que surgió
de la primera palabra que se formó del caos
y así el verbo se hizo carne y fundó
un versar de cosas …
¿Y cómo versar? sí, no sé,
hacerlo
y desde el suelo,
alza en su místico mirar;
la rosa, que en su desesperarse,
despejarse, quiere
porque abrumada se pregunta
¿En qué lejanías del horizonte se funda la esperanza?
Y entonces el universo en versos
desata los hilos inmóviles,
sacando del enorme hueco
que tengo adentro como agujero negro
las finísimas notas,
de un sentimiento que se desfoga
y como mística rosa alzarse quiere del suelo
mi corazón es un tamborileo
que quiere alzarse lejos del mundo
a veces se suele pasar así …
Y desde el suelo,
alza en su místico mirar;
la rosa, que en su desesperarse,
despejarse, quiere,
porque abrumada se pregunta
¿En qué lejanías del horizonte se funda la esperanza?
¿0 en qué cercanías se funda la desesperanza?
Beatriz Elena reservados © Derechos todos
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